“Incredulidad o falta de
confianza en la verdad o eficacia de una cosa.”
Facilitador: Arq. Luis José Polanco
Presentación realizada por: Adelaida Ramos Soto
Por: Joelin G. Santos Contreras
Clase: E-Diplomacy
MAESTRÍA EN RELACIONES INTERNACIONALES
Una nueva forma de ver los
cambios en la diplomacia, especialmente en cuanto a los cambios y los avances
que nos ofrece la tecnología y su marcha rápida en dirección a los nuevos
tiempos, precisamente por la importantes manifestaciones en los medios sociales
y sus resultados inesperados, resulta un tema obligado realizar una lectura
analítica de la situación actual.
Fueron
más bien unas interesantes series de lecturas asignadas por el facilitador, las
mismas eran producto de una secuencia lógica
que nos contaban en formas extraordinarias las influencias de los medios
electrónicos y sus diversas redes sociales en la diplomacia actual, fue
un verdadero cóctel de emociones en el salón de clase, siempre lo es hablar de
una realidad de la que inconscientemente somos cómplices y más aún si a diario
aportamos al fortalecimiento de la misma, más bien podemos decir que forma
parte de nuestro día a día, es como una lectura obligatoria del periódico
matutino para tener referencia de las situaciones actuales.
En
su brillante exposición la joven Ramos, nos hablan de un tema que nos resultar
una voz de alerta o el punto de atención, pues
después de 15 años en el cuerpo diplomático Británico, Carne Ross pasó a
ser un "diplomático Independiente", manejando una osada ONG que le da
una voz de relaciones internacionales a naciones pequeñas en desarrollo y
aún-no-reconocidas. En la conferencia BIF-5 hace un llamado para un nuevo tipo
de diplomacia que le dé una voz a naciones pequeñas, que trabaje en cambiar los
límites y que fomente la innovación.
En
su lectura el señor Ross nos manifiesta algunos aspectos de relevancias a ser
tomados en consideración, cuestiona la realidad de la importancia de la relaciones internacionales
desde su punto de vista objetivo, también debate la eficacia de los medios
electrónicos y su forma de accionar, duda de la interacción a través de la
redes sociales de los gobiernos con el pueblo, plantea que son más bien canales
de comunicación unilaterales, entiende también que pueden ser fuente de recolección
de opiniones, pero que no motiva el debate como tal, o por lo menos a través de
algunas plataformas en específico.
Según
Ross “Al final de cuentas no existe ningún diálogo sino más bien opiniones
separadas”. Son múltiples los elementos que pueden influir en la diplomacia
actualmente, más importante aún es el reconocimiento que juega el papel del
manejo de las redes sociales, pero como bien cuenta el autor, no toda la
ciudadanía cuentan con las facilidad para acceder a estos medios, para otro
ciudadanos, no solo los temas propios de las situaciones relacionada a la
diplomacia el principal foco de interés que le ocupan o que
le motive a interacciones por esa vías,
son más bien los menos, claro, muy importantes, pero en diplomacia desde la realidad
pura y siempre de los estados debemos garantizar la participación de la mayoría de los
actores en la tomas de decisiones
con respeto a favorecer a los ciudadanos
mismo, gestar políticas públicas que trascienden en favor del pueblo
representado y que se constituyan con acciones que ampare en el presente y
futuro los interese de la nación y sus representados.
La
diplomacia tradicional continúan conservando niveles importantes de predominio
antes su ejecutores, puesto que la misma
posee protocolos establecidos que gozan de niveles de confianza y valoraciones
elevados pues continúa siendo
confidencial, seguro y lo más importante que cuenta con las aventajada
característica de suscitar emociones y sentimiento, cosa que en ocasiones una
interacción vía twitter, whatsapp, instagram,
facebook o cualquier otro de medio.
En
término positivo también invita a los
gobiernos a utilizar las redes sociales como herramientas de idónea para
escuchar a sus ciudadanos, no aceptando con esta recomendación que esta
herramienta será el nuevo medio para hacer diplomacia efectiva, más bien lo
sitúa con un nuevo recurso, el que
manejado en la forma adecuada puede servir como medio de recepción de importantes posicionamientos sociales y
aspiraciones presentadas como mecanismos de demandas y posicionamientos de
intereses en relación a temas específicos.
Si
bien Carne Ross desde su experiencia como diplomático ve la tecnología con ciertos niveles de reservas
no estaba cambiando a la naturaleza fundamental de las relaciones exteriores,
puesto que al final de cuenta los Estados tomaban sus decisiones a sabiendas de
las opiniones de los ciudadanos (todo
esto por su posición pesimista).
Sin
embargo, desde un punto optimista, la Diplomacia Electrónica utiliza sus
mecanismos para desarrollar y actualizar la comunicación entre diplomáticos y
el mundo entero.
Las interacciones internacionales, la ampliación
en la participación, ya sea como protagonista
espectador, revoluciona la forma de hacer diplomacia.
Carne
Ross en sus palabras finales hace énfasis en que como diplomáticos debemos
mantener un registro de nuestras emociones, de nuestros principios y de
nuestras conciencias. Estoy totalmente de acuerdo con estos principios de
honestidad, pero no corroboro que un diplomático resulte frustrado por el
simple hecho de preocuparse por querer cambiar el mundo y por velar por su política exterior.
Es importante identificar los medios que justifican nuestro
fin cuando actuamos en nombre de la diplomacia, es importante saber la importancia
de las nuestras acciones y el rol que desempeña de la misma para cada estados y
sus ciudadanos, sería imposible hoy en día hacer diplomacia ignorando los
nuevos mecanismo.